Hoy saludé al arquitecto J. Isabel. Me habló de un proyecto de dos plantas. En la primera, comedor, cocina, área de lavado, dos recámaras con dos baños completos. No habrá sala de estar a petición del dueño. En la planta alta, dos departamentos, con el acceso desde el fondo del predio, lo cual no parece adecuado, pues una entrada independiente, para que lo sea, debe venir desde la calle misma. ¿Por qué no dos recámaras amuebladas con baño completo y ahí termina el asunto? El paradigma ha cambiado, y ahora es mejor rentar por semana, o día, que tener una vivienda completa y pagar mes con mes. Pronto no habrá nada de esto último, si no por necesidad, porque hay un riesgo muy alto. Aunque bueno, si me da tres meses de adelanto y un depósito, pues entonces tenga las llaves.
Veo en el periódico de la ciudad, pues no lo había comprado en muchos días, la foto de una ex diputada local, de lentes gigantescos y traje sastre. Desentona el bolígrafo económico en su mano derecha. Un Zebra F-301 para la diputada, de inmediato y repitan la sesión fotográfica.
Hoy cunde la desconfianza en nuestra sociedad. El Zeitgest del día es el temor y la falta de tiempo.
Me desconcierta llegar a este nivel y no tener alguien que remotamente sea parecido a un amigo. ¿De dónde ha venido el odio que tanta gente siente hacia mí? Una vez más, y no me voy a cansar nunca, le vuelvo a decir a Sonia Fresse que deje de seguir este humilde blog. Usted es gente non grata aquí. Ha sido alguien de quien he necesitado algo muy sencillo y ella no ha querido darlo. Entonces ¿para qué sigues aquí?
Saludos. Para ella no.
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