No cabe duda que Don Carlos Loret de Mola se ha consolidado como uno de los grandes directores de escena de nuestros tiempos, próximo a fundar la escuela de actuación para Marinos que buscan diversificar el rumbo y que pueden ser grandes histriones, a la altura de Robert De Niro, Dustin Hoffman, Al Pacino, o mi favorito, Pedro Armendáriz Jr. Ya en serio, como que empieza a molestar que se burlen de los televidentes, o esa será precisamente nuestra expectativa al ver los canales del duopolio. Esto último me niego a pensarlo, pues la oferta a veces es muy buena, como la de Azteca Trece los viernes en la noche con una barra de opinión inmejorable y por si fuera poco, con una buena oferta de cine norteamericano doblado al español para pasar un buen y necesario domingo por la tarde.
Eso que hay qué hacer.
Satisfecho por pagar a un proveedor del negocio de mis padres, también por cumplir con las obligaciones del IMSS, que duelen de verdad, y es que seguiré insistiendo en decir en que uno de los lastres de un verdadero crecimiento integral en nuestro país, es ese esquema de seguridad social tan costoso para todos, no nada más para los que pagan y espero se entienda la afirmación. Costoso para todos, e interpreten mi silencio.
Hay más cosas para mañana y ahora sí le pido al Cosmos que salgan bien.
Lunes de arquitecturas.
Entonces que llega un policía estatal (así se identificó) y que me dice que no tema, que ya sabe que no quiero hacer planos arquitectónicos para Pensiones del Estado, pero que él si paga. Yo le expliqué que todo es mucho más complejo que eso. Que hubo un problema, lo afirmo con toda la certeza, de celos profesionales y franca animadversión a mi persona. ¿Qué hacer ante eso? Desear, como en este momento, irme del estado, y volver a empezar, en un lugar sin tanta envidia, resentimientos o celos profesionales. Pido lo que todos los demás: una oportunidad para desarrollarme, un modo honesto de subsistir, y forjar un porvenir.
Es que esta profesión es larga, como me lo dijo uno de mis profesores del Tec de Monterrey. En junio cumplo dieciséis años de haber obtenido mi título de Arquitecto y tal vez ya he alcanzado un nivel suficiente para virar y buscar otros ámbitos. Ya estuvo bueno.
Valga decir que también me llamó mi estimado amigo Juan José, y yo le contesté que todavía no tengo su plano gracias y ni hablar al negocio de mis padres, lugar donde estoy mientras sale algo mejor, pero que para el jueves...me vuelva a llamar.
Historias de la realidad alternativa.
P r ó x i m a e n t r a d a.
Dudas y comentarios en lalo4488@gmail.com
Saludos y paciencia.
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